Volvo XC70 D5
Entre las berlinas puras de carretera que no pueden abandonar el asfalto y los todo terreno puros que únicamente en el campo es donde se encuentran a gusto, a aparecido en los últimos años toda una generación de modelos intermedios a los que genéricamente se les ha denominado SUV's y que cubren las numerosas posibilidades intermedias. El primer paso entre berlina y todo terreno los constituyen los modelos normales dotados de tracción a las cuatro ruedas que, por otro lado, no nacieron para salir del asfalto, sino para moverse con más seguridad cuando éste está mojado o nevado. El escalón siguiente lo forman los modelos basados en carrocerias de berlinas con tracción integral (permanente o no), ligeramente sobreelevadas y con los recorridos de suspensión algo alargados a los que se añaden protecciones en los bajos. Estos últimos modelos, a los que pertenece el Volvo XC70, sí que tienen una importante capacidad de movimiento fuera del asfalto y por eso los llamamos con frecuencia "todo caminos". El nuevo Volvo XC70 D5 es un poco el representante típico de este grupo, dirigido en este caso a una clientela premium que acepta realizar un desembolso relativamente importante pero desea un vehículo que a las cualidades de ser un excelente rodador en carretera y de moverse con soltura por los caminos camperos, sume las de tener una cierta categoría y una buena imagen de marca. Es decir, un modelo al que podríamos calificar como de lujoso pero con un toque de aventurero.
La nueva generación del Volvo XC70, de la que hemos elegido para una primera prueba a fondo el propulsor D5 porque pensamos que es el más interesante en cuanto a su configuración, no rompe en absoluto con la línea de su predecesor, del que es sencillamente una actualización y puesta al día con las que gana en interés y atractivo. Son por ello nuevos el diseño de su frontal, detalles de acabo en el lateral y el diseño de su trasera, que respetando las formas generales camibia en profundidad al incorporar en el portón (que también opcionalmente se abre y cierra con un sistema electrohidráulico), parte de los pilotos traseros, con lo que gana en apertura de carga y en capacidad interior. En esta última se aprecia un agradable incremento en la calidad percibida, buen ajuste, materiales de primera calidad y un diseño del cuadro completo y ergonómico muy fiel al estilo tradicional de la marca y muy agradable para el conductor. Ya sucicientemente amplio, el nuevo Volvo XC70 gana algo de espacio en su interior y especialmente en la distancia entre filas de asientos con lo que los ocupantes de las plazas traseras disponen de un más que generoso espacio.
El nuevo Volvo XC70 dispone de un buen equipo básico, tanto en el confort como en laseguridad, aunque lo más interesante en este último aspecto se ofrece como opción. Es el caso del control de crucero adaptable que funciona mediante un radar frontal, o el sistema de advertencia de colisión bsado en el anterior. También son opcionales los faros bi-xenon activos y las ayudas a la conducción denominadas BLIS e IDIS. La primera informa con la ayuda de una cámara integrada en el retrovisor sobre la entrada de algún vehículo en el ángulo muerto posterior, y la segunda, elimina información irrelevante que en situaciones especiales pueda distraer al conductor. También el denominado chasis activo, con tres opciones de comportamiento, es opcional.
El cinco cilindros diésel que emplea el D5 es una mecánica fiable y bien conocida que en esta última configuración pone a disposición del conductor una potencia máxima de 185 caballos y un par máximo de 400Nm a 2.000 revoluciones. Es un motor brillante y con una gran reserva de potencia que asume el compromiso de mover con soltura una carrocería con un peso importante (no declarado en su ficha técnica pero superior a los 1.700 kilos). En combinación con una caja de cambios automática de seis velocidades, resultaba enormemente confortable en su conducción, aunque también sumamente tranquilo tanto por la propia reacción del motor como por los retrasos en el cambio de velocidades, ya que su caja es muy lenta. Con una buena velocidad punta y un crucero desahogado, el Volvo XC70 D5 se presta más a una conducción tranquilamente rápida que a otra nerviosamente ágil. Silencioso y, además, confortable de suspensión, la posibilidad de regular ésta en carretera mejora aún más el comportamiento y las reacciones de un chasis que sobre el asfalto hemos encontrado que posee unas excelentes cualidades y que además, las transmite a su conductor. La posición estándar responde al máximo confort, la "sport" endurece algo la amortiguación y mejora el comportamiento y la "advanced" es la recomendada en una conducción más agresiva. Eficaz en sus frenos y equilibrado incluso en las frenadas extremas a alta velocidad, con una dirección precisa y agradable en su manejo, el Volvo XC70 D5 es en carretera un excelente rodador de fondo perfecto para los largos desplazamientos en los que su discreto consumo de carburante es también un factor a tener en cuenta.
Por tracción, por chasis y por capacidad, el Volvo XC70 D5 es una eficaz herramienta de diversión tanto para deportistas de la naturaleza como cazadores o pescadores. No es un todoterreno puro, pero circulando con cierto cuidado es muy capaz, no sólo de circular con cierta rapidez por malos caminos, sino de superar pasos comprometidos. De hecho, el compromiso con el conductor pasa por renunciar a la utilización de un ruedín de repuesto (o ni siquiera utilizarlo), para colocar una verdadera quinta rueda (aunque no con llanta de aleación). Tuvimos la oportunidad de valorar en todo su alcance este detalle, porque pinchamos en un mal camino (algo completamente normal, porque en los caminos todavía se pincha, cosa que ya no ocurre apenas sobre el asfalto). Esa quinta rueda normal es esencial y las herrmientas del XC70 están pensadas también para su utilización en circunstancias difíciles.
Por otra parte, el sistema de tracción integral inteligente del XC70 es bastante eficaz. Normalmente circulammos con tracción en el tren delantero, pero un diferencial dotado de un embrague hidráulico controlado electrónicamente reparte el par entre los dos ejes en función del estado del camino y la adherencia de las ruedas. Es de serie el sistema de descenso de pendientes, que puede resultar interesante en situaciones muy críticas, que no son las que serán normales con este modelo, y también lo es el más interesante sistema de arranque en cuesta que frena el vehículo automáticamente hasta que actuamos sobre el acelerador y arrancamos.
La nueva generación del Volvo XC70, de la que hemos elegido para una primera prueba a fondo el propulsor D5 porque pensamos que es el más interesante en cuanto a su configuración, no rompe en absoluto con la línea de su predecesor, del que es sencillamente una actualización y puesta al día con las que gana en interés y atractivo. Son por ello nuevos el diseño de su frontal, detalles de acabo en el lateral y el diseño de su trasera, que respetando las formas generales camibia en profundidad al incorporar en el portón (que también opcionalmente se abre y cierra con un sistema electrohidráulico), parte de los pilotos traseros, con lo que gana en apertura de carga y en capacidad interior. En esta última se aprecia un agradable incremento en la calidad percibida, buen ajuste, materiales de primera calidad y un diseño del cuadro completo y ergonómico muy fiel al estilo tradicional de la marca y muy agradable para el conductor. Ya sucicientemente amplio, el nuevo Volvo XC70 gana algo de espacio en su interior y especialmente en la distancia entre filas de asientos con lo que los ocupantes de las plazas traseras disponen de un más que generoso espacio.
El nuevo Volvo XC70 dispone de un buen equipo básico, tanto en el confort como en laseguridad, aunque lo más interesante en este último aspecto se ofrece como opción. Es el caso del control de crucero adaptable que funciona mediante un radar frontal, o el sistema de advertencia de colisión bsado en el anterior. También son opcionales los faros bi-xenon activos y las ayudas a la conducción denominadas BLIS e IDIS. La primera informa con la ayuda de una cámara integrada en el retrovisor sobre la entrada de algún vehículo en el ángulo muerto posterior, y la segunda, elimina información irrelevante que en situaciones especiales pueda distraer al conductor. También el denominado chasis activo, con tres opciones de comportamiento, es opcional.
El cinco cilindros diésel que emplea el D5 es una mecánica fiable y bien conocida que en esta última configuración pone a disposición del conductor una potencia máxima de 185 caballos y un par máximo de 400Nm a 2.000 revoluciones. Es un motor brillante y con una gran reserva de potencia que asume el compromiso de mover con soltura una carrocería con un peso importante (no declarado en su ficha técnica pero superior a los 1.700 kilos). En combinación con una caja de cambios automática de seis velocidades, resultaba enormemente confortable en su conducción, aunque también sumamente tranquilo tanto por la propia reacción del motor como por los retrasos en el cambio de velocidades, ya que su caja es muy lenta. Con una buena velocidad punta y un crucero desahogado, el Volvo XC70 D5 se presta más a una conducción tranquilamente rápida que a otra nerviosamente ágil. Silencioso y, además, confortable de suspensión, la posibilidad de regular ésta en carretera mejora aún más el comportamiento y las reacciones de un chasis que sobre el asfalto hemos encontrado que posee unas excelentes cualidades y que además, las transmite a su conductor. La posición estándar responde al máximo confort, la "sport" endurece algo la amortiguación y mejora el comportamiento y la "advanced" es la recomendada en una conducción más agresiva. Eficaz en sus frenos y equilibrado incluso en las frenadas extremas a alta velocidad, con una dirección precisa y agradable en su manejo, el Volvo XC70 D5 es en carretera un excelente rodador de fondo perfecto para los largos desplazamientos en los que su discreto consumo de carburante es también un factor a tener en cuenta.
Por tracción, por chasis y por capacidad, el Volvo XC70 D5 es una eficaz herramienta de diversión tanto para deportistas de la naturaleza como cazadores o pescadores. No es un todoterreno puro, pero circulando con cierto cuidado es muy capaz, no sólo de circular con cierta rapidez por malos caminos, sino de superar pasos comprometidos. De hecho, el compromiso con el conductor pasa por renunciar a la utilización de un ruedín de repuesto (o ni siquiera utilizarlo), para colocar una verdadera quinta rueda (aunque no con llanta de aleación). Tuvimos la oportunidad de valorar en todo su alcance este detalle, porque pinchamos en un mal camino (algo completamente normal, porque en los caminos todavía se pincha, cosa que ya no ocurre apenas sobre el asfalto). Esa quinta rueda normal es esencial y las herrmientas del XC70 están pensadas también para su utilización en circunstancias difíciles.
Por otra parte, el sistema de tracción integral inteligente del XC70 es bastante eficaz. Normalmente circulammos con tracción en el tren delantero, pero un diferencial dotado de un embrague hidráulico controlado electrónicamente reparte el par entre los dos ejes en función del estado del camino y la adherencia de las ruedas. Es de serie el sistema de descenso de pendientes, que puede resultar interesante en situaciones muy críticas, que no son las que serán normales con este modelo, y también lo es el más interesante sistema de arranque en cuesta que frena el vehículo automáticamente hasta que actuamos sobre el acelerador y arrancamos.
Fuente: supercoch.es
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